lunes, 14 de septiembre de 2009

LAS CIENCIAS SOCIALES EN EL ESPACIO ESCOLAR

La formación de las ciencias sociales en el modelo de educación moderno se centraba en la imagen del ciudadano, como sujeto que formaba parte de una identidad nacional y de una cultura común. Su enseñanza estaba orientada a transmitir los valores que garantizaran ese sentimiento nacional, en difundir e inculcar los hábitos de comportamiento social e individual y garantizar la apropiación de conocimientos y herramientas de las generaciones pasadas que posibilitaran igualar a los sujetos. El docente fue la figura clave en este proceso y su misión consistía en el disciplinamiento y domesticación de los alumnos.
Pero en el contexto actual, éste es un modelo agotado. Bajo la lógica del Estado-nación la subjetividad dominante fue disciplinaria, pero hoy tenemos que hablar de otro tipo de subjetividad que es massmediática. Y es justamente en este punto donde se produce un desacople, ya que la escuela continúa operando bajo la lógica de educación moderna y sus alumnos son interpelados desde ahí y no desde lo mass mediático. O sea hay un alumno supuesto por el docente y uno real. Este alumno real vive en el mundo de la imagen y de la opinión personal, de los saberes descentrados, ya no son los padres o los docente los únicos portadores y transmisores del saber, sino que lo encuentra en la calle, en Internet, en el club del barrio, etc. Con las nuevas tecnologías que arribaron en nombre del progreso no solo se tecnificó la sociedad sino que se transformaron sus prácticas cotidianas y por lo tanto, el escenario social es otro. La formación en ciencias sociales tiene que ser abordada desde esta realidad que traspasa cotidianamente a los alumnos. La transmisión, la comunicación de los saberes debe pensarse desde las coexistencia tensa entre las viejas y nuevas prácticas y procesos sociales.
La comunicación tiene su implicancia social, en cuanto a que es un espacio de procesos y prácticas de producción simbólica y no solamente ideológica. En el universo comunicacional hay una multiplicidad de modos y formas que tiene la gente para comunicarse: el graffiti, el muralismo, los piquetes, la peregrinación, los recitales, el uso del celular, juntarse en el ciberespacio, en la escuela o en la plaza. Estos diferentes modos son los que van moldeando las identidades sociales con sus heterogéneas formas de sentir, de pensar y de actuar.
Entonces problematizar los procesos educativos en Comunicación hoy, supone pensar los aportes que las ciencias sociales hacen a la formación de “nuevos sujetos en nuevos contextos” y también, su contribución a un futuro, ya no certero pero posible y deseable.
Uno de estos aportes para recorrer este camino sería, poder articular experiencias de formación, que partan de identificar rasgos, procesos, prácticas y problemáticas que atraviesan al los sujetos como sujetos de la historia y que puedan ser problematizadas para ampliar las posibilidades de comprensión y de intervención en el mundo. Esto implicaría construir los procesos de formación a partir del dialogo entre las diversas lecturas que sobre la realidad hacen los diferentes sujetos: estudiantes, docente, saberes del campo de la comunicación como campo académico.
Otro eje sería el de situar a los procesos de formación como resultantes de los saberes que circulan y de los modos en que los sujetos transitan y construyen las experiencias de formación. Y por último sería que los sujetos puedan situarse y visualizarse como productores culturales ya que desde la diversidad cultural de las historias y los territorios, de las experiencias y las memorias es desde donde no solo se resiste sino que se negocia e interactúa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario